H.G.Wells
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Retrato a través de un caleidoscopio
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- Melpómene
- Son susurros al pie del precipicio para no hablar sola y que el eco no me devuelva a la realidad y lo haga ridículo. Mis disculpas por adelantado a quien pasee por el cañón.
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Faros en la niebla
Romance de la pena negra
Las piquetas de los gallos
cavan buscando la aurora,
cuando por el monte oscuro
baja Soledad Montoya.
Cobre amarillo, su carne,
huele a caballo y a sombra.
Yunques ahumados sus pechos,
gimen canciones redondas.
Soledad, ¿por quién preguntas
sin compaña y a estas horas?
Pregunte por quien pregunte,
dime: ¿a ti qué se te importa?
Vengo a buscar lo que busco,
mi alegría y mi persona.
Soledad de mis pesares,
caballo que se desboca,
al fin encuentra la mar
y se lo tragan las olas.
No me recuerdes el mar,
que la pena negra, brota
en las sierras de aceituna
bajo el rumor de las hojas.
¡Soledad, qué pena tienes!
¡Qué pena tan lastimosa!
Lloras zumo de limón
agrio de espera y de boca.
¡Qué pena tan grande! Corro
mi casa como una loca,
mis dos trenzas por el suelo,
de la cocina a la alcoba.
¡Qué pena! Me estoy poniendo
de azabache, carne y ropa.
¡Ay mis camisas de hilo!
¡Ay mis muslos de amapola!
Soledad: lava tu cuerpo
con agua de las alondras,
y deja tu corazón
en paz, Soledad Montoya.
Por abajo canta el río:
volante de cielo y hojas.
Con flores de calabaza,
la nueva luz se corona.
¡Oh pena de los gitanos!
Pena limpia y siempre sola.
¡Oh pena de cauce oculto
y madrugada remota!
F. Gacía Lorca
cavan buscando la aurora,
cuando por el monte oscuro
baja Soledad Montoya.
Cobre amarillo, su carne,
huele a caballo y a sombra.
Yunques ahumados sus pechos,
gimen canciones redondas.
Soledad, ¿por quién preguntas
sin compaña y a estas horas?
Pregunte por quien pregunte,
dime: ¿a ti qué se te importa?
Vengo a buscar lo que busco,
mi alegría y mi persona.
Soledad de mis pesares,
caballo que se desboca,
al fin encuentra la mar
y se lo tragan las olas.
No me recuerdes el mar,
que la pena negra, brota
en las sierras de aceituna
bajo el rumor de las hojas.
¡Soledad, qué pena tienes!
¡Qué pena tan lastimosa!
Lloras zumo de limón
agrio de espera y de boca.
¡Qué pena tan grande! Corro
mi casa como una loca,
mis dos trenzas por el suelo,
de la cocina a la alcoba.
¡Qué pena! Me estoy poniendo
de azabache, carne y ropa.
¡Ay mis camisas de hilo!
¡Ay mis muslos de amapola!
Soledad: lava tu cuerpo
con agua de las alondras,
y deja tu corazón
en paz, Soledad Montoya.
Por abajo canta el río:
volante de cielo y hojas.
Con flores de calabaza,
la nueva luz se corona.
¡Oh pena de los gitanos!
Pena limpia y siempre sola.
¡Oh pena de cauce oculto
y madrugada remota!
F. Gacía Lorca
7 comentarios:
Bajo mi punto de vista, la historia es una parte del todo. Precisamente la parte que alguien decidió que debía escribirse.
Pero también existe todo aquello que nadie recuerda excepto los propios protagonistas.
besos señora de rojo (te hemos hechado un poco de menos, tantos días viniendo a buscarte pero sin oit tu voz...)
Lo que yo me pregunto es si la sociedad avanza hacia la catástrofe a base de más o de menos educación. Pocas sociedades han habido más cultas que la Alemania de principios de siglo y mira tú por dónde. ¿Habrá que elegir entre ser analfabetos o ser asesinos?
Petrarca, no sé qué contestaría Wells, yo diría que no. Para mí la educación trae luz, consciencia y opciones. Tiene un plus de gravedad optar por la catástrofe cuando hay discernimiento y se opta por ella. Ahora, quizá tendríamos que entrar a valorar qué entiende cada cual por educación, pero eso ya es un capítulo aparte... Besos a los dos
Oh, también habría que valorar qué es catástrofe y para quién: la ignorancia siempre ha sido empleada por quien ha podido hacerlo para mantener a ciertas personas y situaciones bajo control, desde este punto de vista se podría afirmar que a educación puede llevar a la catástrofe ;p
Entonces nada. Al parecer estamos abocados a la desgracia por una parte y por otra, tanto por la dejadez como por la ambición. Cachis!
¡Peor todavía: somos conscientes de ello!Esto para un futuro educador tiene que ser devastador ;D
He aquí el mensaje de una educadora: SIEMPRE HAY ESPERANZA DE MEJORAR!!
Si los pedagogos, maestros, educadores, asistentes sociales, ... pensásemos que no hay alternativa moriríamos de pena y no podríamos trabajar. El optimismo es fundamental en algunas profesiones!
Y es cierto, pq podríamos estar peor. En algunas cosas vamos avanzando (entendido como libertad y dignidad para las personas), lentamente, eso sí, pq la educación es un tema a largo plazo. Y en las cosas que empeoramos: quizá ir a peor nos servirá para ir después a mejor.
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